La compensación al viajero será del 100% del billete si el servicio se demora más de una hora y media; la ruta entre Vigo y Madrid debutó con un atraso de más de dos horas
Los continuos retrasos que registra el AVE Vigo-Madrid bonificarán menos en sus viajeros. Renfe reajustará a partir del 1 de julio las indemnizaciones que aplican tras una llegada tardía de sus servicios. Para recibir el 50% del billete, el tren deberá llegar una hora tarde y no 15 minutos como estaba antes estipulado. Para indemnizar al cliente con la totalidad del pasaje, el servicio deberá llegar a su destino 1 hora tarde y media tarde y no 30 minutos como se encuentra fijado actualmente. Una medida que llega tras detectarse una gran cantidad de retrasos en el Avril S106 que conecta Vigo y Madrid, que lleva menos de un mes en funcionamiento.
No comenzó bien la andadura de la alta velocidad en cuanto a su puntualidad. Las diferentes incidencias técnicas o averías de menor entidad que se fueron sucediendo desde su estreno hizo que los pasajeros llegasen muchas veces a su destino con un retraso entre los 15 y la media hora, una franja que estaría penalizada en un 50% en el AVE (no así en el Alvia, que la indemnización al pasajero se producía cuando se superaba la hora de duración). Pero otras averías en el S106, como la sucedida en su propio debut o en la misma semana de su estreno, donde un error en el sistema de seguridad ERTMS y el pantógrafo en la estación de Madrid-Chamartín hizo que el tren llegase a Vigo con una hora de retraso y más allá de la medianoche a Vigo.
Este nuevo compromiso se equilibria en todos los servicios comerciales prestados por Renfe (AVE, Avlo, Alvia, Euromed e Intercity). Por tanto, no solo afectará al Vigo-Madrid sino también al que transcurre por el Eje Atlántico entre Vigo y A Coruña. Sin embargo, esta conexión si bien registra retrasos continuos debido a las deficiencias en su infraestructura, apenas superan los 20 minutos de duración, y desde el 1 de julio ya no estarían sujetos a un reembolso parcial.
Equipara el ‘castigo’ a otros operadores
Con esta medida, Renfe se equipara a las compensaciones que realizan los otras dos compañías ferroviarias que operan en España (Iryo y Ouigo) que todavía no cuentan con presencia en Vigo. Sin embargo, seguirá distinguiéndose de la competencia a la hora de elegir la forma de cobrar esa indeminización. Si lo hace en efectivo o tarjeta, no habrá ventajas adicionales, pero si se escoge un vale de compra para otro billete, el reembolso será del 150%, y si el usuario se decanta por los nuevos puntos Renfe (Renfecitos), el reembolso llegará al 200%. Para esta última opción, habrá que disponer de la tarjeta Más Renfe.
En ese caso, Renfe defiende que seguirá ofreciendo "las mejores condiciones de compensación del mercado". El comienzo del pago por retrasos comenzó en el año 1992, con un compromiso firme de la empresa ferroviaria con la puntualidad. Con un retraso de cinco minutos, se devolvía el importe íntegro del billete. Este medida se suprimió en 2016.
La Xunta y Facua piden explicaciones ante este cambio
El conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo, manifestó ayer que pedirán "explicaciones" por la decisión de eliminar las indemnizaciones que Renfe ofrecía hasta ahora por retrasos de 15 y 30 minutos en los AVE. A partir de julio solo indemnizará los retrasos de un mínimo de 60 minutos, limitándose así a cumplir con la normativa española. A preguntas de los periodistas, coincidiendo con su presencia en un acto conmemorativo promovido por la Delegación del Gobierno en Galicia, trasladó el "estupor" en la Xunta por el "cambio" en la política de indemnizaciones.
"Nos preocupa que los retrasos que se está sufriendo en Galicia no sean coyunturales y solucionados en poco tiempo, da la sensación que pasan a ser habituales y normales", aseveró sobre la llegada de los trenes Avril a Galicia. El conselleiro aseguró que por parte del Ejecutivo gallego se entendió que "en los primeros viajes" pudiera existir "algún desajuste" pero no "tres semanas más tarde".
Facua-Consumidores en Acción, por su parte, calificó de "inaceptable" la medida. Aunque siga cumpliendo con la normativa europea sobre los derechos y las obligaciones de los viajeros de ferrocarril, para Facua esta actualización del compromiso de puntualidad de Renfe "supone una merma importante en los derechos de los usuarios ante la impuntualidad o retrasos importantes que puedan sufrir en sus viajes". Asismismo, criticó la búsqueda de colocarse la empresa ferroviaria a la altura de sus competidores y retrasar la liberalización del mercado para otoño. Solo en el año 2023, Renfe abonó 42 millones de euros a sus usuarios en compensaciones por retrasos.
