La demanda presentada por una vecina de la calle Areal por la afectación sufrida durante las navidades 2022-2023 a consecuencia del exceso de ruido del mercado y el parque de atracciones situado en la zona ha sido admitida parcialmente por el Tribunal Superior de Xustiza, que le dio la razón frente a un primer pronunciamiento desfavorable del juzgado de lo Contencioso. El alto tribunal gallego sí considera acreditado que “el ruido padecido por la apelante tuvo carácter persistente, ya que su continuidad perduró prácticamente dos meses y fue intenso porque superó los límites legales permitidos”. Así, condena al Concello al pago de una indemnización y a “adoptar las medidas necesarias para evitar la reiteración de su conducta lesiva de los derechos fundamentales” y para garantizar “que los niveles de ruidos exteriores e interiores no rebasen los umbrales fijados por las normas aplicables”.
El recurso fue aceptado parcialmente, ya que la vecina reclamaba una indemnización de 1.640 euros, equivalente a su juicio al precio del arrendamiento de una vivienda similar en un lugar tan céntrico, sin embargo, el tribunal impone una cifra más baja, de 600 euros, al no haberse acreditado el valor que solicita. En contra del criterio del juzgado de lo Contencioso, el TSXG entiende que además de las mediciones del Concello se tenían que haber tenido en cuenta las de la apelante y finalmente entiende que ese ruido, “excedía los límites y podría conllevar una afectación potencial a la salud de las personas”, al tiempo que resalta que “implica un menoscabo del desarrollo de la personalidad, al imposibilitar el de la vida diaria, lo que vulnera los derechos fundamentales denunciados como violados”. Además, los magistrados señalan que entonces el Concello “se mantuvo inactivo al respecto de la contaminación acústica que se estaba produciendo” .
El tribunal recuerda que “existe un deber de los poderes públicos de garantizarnos el disfrute de nuestro descanso y tranquilidad mínima, no debiendo caber duda al ente local de que el interés jurídico que ha de resultar prevalente es el derecho de los ciudadanos a la no recepción de ruidos molestos, como expresión de calidad de vida digna”.
El gobierno local dice que el fallo no cuestiona la Navidad
El portavoz socialista del gobierno local, Carlos López Font incidió en que la sentencia “no cuestiona la Navidad de Vigo” sino que “se refiere exclusivamente al ruido” y en el año 2022, antes, dijo de adoptarse medidas correctoras. “Prácticamente, todas las medidas que se solicitan están corregidas, con el cambio de atracciones, de ubicación de la noria o el volumen de la música” e hizo hincapié en que, en función de las mediciones, seguirán adoptando las medidas necesarias.
Así, afirmó que “el intento del PP y del BNG por acabar con la Navidad de Vigo ha fracasado”.
A este respecto, el grupo popular aseguró que esta sentencia “otra más en contra de Caballero" “pone en evidencia su forma de gobernar, en una hipérbole permanente”, mientras que los nacionalistas exigieron al alcalde que se disculpe con los vecinos y rectifique el diseño de la Navidad para evitar que “vuelva a ser un caos insoportable”.
