La investigación judicial abierta tras la detención de los tres presuntos atracadores de una entidad bancaria en Gran Vía, de la que sustrajeron 300.000 euros, trata de recabar pruebas que corroboren las sospechas de la Policía sobre la participación de los investigados en otros dos asaltos frustrados. Junto a la recogida del ADN de los tres históricos, Manuel Fernando, Tielas y Berto, el Juzgado de Instrucción 1 ha ordenado el volcado de sus teléfonos móviles.
La información que la Policía pueda extraer de las terminales será clave para poder situarlos en la misma sucursal a finales de noviembre y un mes después en otra en Matamá, a la que ni llegaron a acceder porque los empleados no abrieron la puerta. Eso suponiendo que en ambas ocasiones llevaran consigo los móviles. La investigación policial cuenta con indicios de estos dos hechos y un tercero al que solo vincularía a uno de los tres: el atraco con arma y cuchillo a una clínica dental en Coia, también en noviembre.
Las muestras biológicas fueron ordenadas en su momento por el juzgado y una vez se tengan los resultados se cotejarán con las recogidas en la oficina de Caixabank, donde tuvo lugar el asalto con el botín más abultado que se recuerda. Los tres, que fueron detenidos junto a la pareja de uno de ellos, continúan en A Lama. Ella quedó en libertad. Tielas, el único que se acogió a su derecho a no declarar, había sido detenido unos meses antes por su presunta vinculación con un atraco en Martínez Garrido con “Migallas” pero ambos en ese momento quedaron libres, una situación que duró poco tiempo.
