La Escuela Infantil de la Cidade da Xustiza terminó recientemente las obras y se prepara para recibir a sus primeros 'inquilinos' en cuanto el nuevo edificio judicial de la ciudad eche a andar. Ayer se acercó la conselleira de Política Social, Fabiola García, para visitar estas instalaciones acompañada de la delegada de la Xunta en Vigo, Marta Fernández-Tapias.
La titular autonómica anunció que esta guardería, que pertenecerá a la red pública, contará con 41 plazas a las que accederán prioritariamente los funcionarios que trabajen en el antiguo Xeral. Pero si estas no se cubren en su totalidad, se abrirán para todos los vigueses.
Esta nueva escuela infantil forma parte del compromiso del Gobierno gallego con la conciliación de las familias. Compromiso que se reforzará con la gratuidad de todas las plazas de educación infantil a partir del curso 22-23. Esta medida amplía la política ya en vigor que aplicaba dicha gratuidad a los segundos hijos y sucesivos y por la que, en palabras de Fabiola García, “Galicia es una referencia a nivel nacional”.
Residencia de la ETEA
La conselleira de Política Social también se refirió a la residencia de mayores que se construirá en la antigua ETEA, apuntando que “la demolición del antiguo cuartel ya está prácticamente terminada y el nuevo edificio se comenzará a construir en las próximas semanas”. Este centro tendrá 150 plazas públicas y está financiado por la Fundación Amancio Ortega, que invierte más de 15 millones de euros.
“Diseñé esta guardería pensando en los Teletubbies”
En la visita de la conselleira y la delegada de la Xunta también estuvo presente el arquitecto encargado de la rehabilitación del antiguo Xeral, Alfonso Penela, que habló sobre cómo se llevó a cabo el diseño de esta escuela infantil dentro del proyecto de la Cidade da Xustiza.
“Cuando surgió la posibilidad de hacer la guardería, vi que había que ubicarla en un lugar que había reservado para una zona ajardinada y arbolada”, explicó. Para solucionar este problema, el veterano arquitecto se acordó de un conocido programa infantil: “Los Teletubbies habitaban debajo de una colina”. Así, esa zona arbolada “se hinchó y creció” en los planos de construcción dejando hueco para la futura escuela infantil en la base, semienterrada.
Penela aseguró que “estar enterrado te da la excusa de hacer cosas que de otra manera no te dejan, como perforar la colina y dejar que entrara luz por otros sitios”. De este modo, en las diferentes aulas se puede observar con claridad el recorrido del sol a lo largo del día.
El arquitecto bromeó: “Posiblemente sea la guardería con más luz natural en este lado del oeste aunque esté enterrada".
Aunque a primera vista parezca que se trata de una construcción ‘sosa’, Penela aseguró que todavía no está terminada: “Lo estará cuando estén aquí los niños y sus cuidadoras. Quiero que el color esté en ellos y en sus trabajos”.
