Alquilar un piso para pasar una semana en julio o en agosto supondrá un esfuerzo medio en la costa española de un 10 % superior (9,95 %) de media nacional al año pasado: un apartamento en primera línea de playa supondrá desembolsar 1.160 euros semanales frente a los 1.055 del año pasado, de acuerdo a los datos de Grupo Tecnitasa en su informe sobre arrendamiento en la primera línea de playa de las principales zonas de costa españolas en agosto.
Con estas perspectivas, pasar una semana en un piso en la zona entre Samil y Coruxo/Canido exigirá abonar una renta semanal de 1.150 euros, siendo uno de los más caros de Galicia. El portal Tecnicasa destaca que een Galicia hay grandes diferencias: se puede conseguir un apartamento en la Playa de Burela o Vicedo por 550 euros frente a los casi inalcanzables 2.900 euros con muy escasa oferta, en la isla de A Toxa, lo más caro. Justo detrás se colocan tres puntos del ayuntamiento de Sanxenxo: en primer lugar, la propia villa, que cotiza a 2.300 euros la semana, también un precio prohibitivo. Portonovo y Silgar, otras dos zonas del mismo municipio, llegan a 1.400 euros. En cuanto al pulso entre Vigo y A Coruña, también en el ámbito turístico residencial, victoria por la mínima para la playa herculina: un apartamento en el entorno de Riazor exige de promedio unos 1.300 euros semanales en verano, frente a los 1.150 de Samil, Canido o Coruxo. La misma cifra o muy similar a los que se pide en Playa América o Baiona, en ambos casos en los 1.150 euros.
Más asequible resulta apostar por unas vacaciones en Cangas: la villa cotiza a 800 euros a la semana de media mientras que en la parroquia de Hío algo más, unos 950 euros, lo mismo que un apartamento en otra playa clásica de la Ría de Vigo, la de Patos.
Sorprende, en esta edición del Informe de Costa de 2024 del Grupo Tecnitasa, el caso de la Mariña de Lugo. El año pasado, en los precios más económicos, se podían encontrar apartamentos por 350 o 450 euros semanales y en 2024 ya no se encuentra nada por debajo de los 550 euros, y subiendo porque Galicia crece como destino.
Fernando García Marcos, de Grupo Tecnitasa, tiene una explicación a este fenómeno y da algunos datos: “El promedio de alquiler vacacional en primera línea de playa alcanza los 1.160 euros semanales. El incremento en los últimos tres años es de alrededor de un 25 por ciento”. Sin embargo, el responsable del estudio quiere aclarar que “el mercado inmobiliario convencional ralentiza el número de transacciones y contiene los incrementos de valor, pero en el mercado de alquiler vacacional, sin embargo, continúan incrementos promedios significativos”.
