Piden año y medio de cárcel por dejar morir de hambre a 5 perros en Gondomar

La Guardia Civil durante la inspección del galpón en 2023.
photo_camera La Guardia Civil durante la inspección del galpón en 2023.
Será juzgado en Vigo acusado de un delito continuado de maltrato animal al encerrar a 5 perros sin agua ni comida

Un vecino de Oia de 35 años se enfrenta a un año y medio de cárcel,  acusado de un delito continuado de maltrato animal por dejar morir de hambre a cinco perros en una finca de Gondomar. El hombre, que fue detenido por la Guardia Civil,  será juzgado este mes en el Penal 3 de Vigo.  

Según el escrito de acusación, el acusado, a partir de mayo o junio de 2021 se hizo cargo de una finca en Donas, de unos 9.000 metros cuadrados de superficie y en la que existen dos establos, de 60 y 40 metros cuadrados respectivamente, pertenecientes a dos dueños, uno un hermano de él. Mediante un acuerdo verbal, se le cedió el uso de la finca para sus animales y, a cambio, se comprometía a mantenerla limpia, sostiene el fiscal.

A partir de entonces, el procesado llevó a la finca varios perros y caballos, a los que poco a poco dejó de alimentar hasta que en febrero de 2023 abandonó la finca, dejando encerrados a un total de cinco perros, repartidos entre los dos galpones, sin agua, ni comida y sin posibilidad de salir, “a sabiendas de que en tales circunstancias, los animales se morirían irremediablemente, lo que efectivamente sucedió”, dice el escrito de acusación.

A finales de abril de 2023, cuando un familiar acudió a la finca vio a través de la ventana que uno de los galpones restos de los perros, por lo que avisó a los titulares y al Seprona, que acudió al lugar la tarde del 28, logrando abrir uno de los establos en el que fueron localizados restos óseos de un perro, restos de otro de color negro, con patas blancas, sin identificación, y la piel de un tercero, con microchip, una perra mestiza que le habían regalado uno tres meses antes. 

Al día siguiente fue posible abrir el segundo galpón y allí se hallaron restos óseos de un perro y los restos de otro, un setter inglés. 

No se pudo acreditar la fecha en la que los perros murieron, si bien, el fiscal sostiene que tuvo que ser bastantes días antes de encontrarse sus restos.

Además de la pena de prisión, se solicitan cuatro años de inhabilitación especial para ejercicio de profesión, oficio,  comercio relacionado con animales, así como para la tenencia de los mismos.

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