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Se dan vueltas al papel, a los números y no terminan de salir. En el final de temporada, el Iberconsa Amfiv vive esas semanas en las que hay que planificar la siguiente y lo más complicado es encontrar el equilibrio monetario. Este aspecto se complica cuando hay cambios en la liga de División de Honor y parece que los hay.
Dentro de que los ascensos no siempre se materializan y que hay renuncias, la situación actual es que la liga de baloncesto en silla tiende a tener los mismos equipos, 12, que la campaña actual. Eso sí, esta decisión no es definitiva porque se barajaba una ampliación de la competición a 14 e, incluso, una reducción a 10 si no se conseguía un cupo.
El UCAM Murcia, cuarto esta campaña, apunta a renunciar y perdería la categoría junto al Puertollano, colista. Y su reemplazo vendría de la Primera División por medio de dos equipos canarios, el Suroeste y el Gran Canaria Vecindario. Algo complicado para el club vigués porque “cada viaje a Canarias son unos 6.000 euros. Si finalmente suben los dos, calcula 12.000”, relata Agustín Alejos. Todo está en el aire porque una de las formaciones isleñas pasa por algún problema económico y no es segura su inscripción.
Ante esta situación, el Amfiv cuida los movimientos, no quiere dar pasos en falso porque el presupuesto es limitado y cambia mucho la liga y la forma de afrontarla si haya que gastar más en los viajes. Todo ello en unas semanas con mucho ruido y movimiento entre los clubes. No se descarta una ampliación liguera, pero la opción parece alejarse. Todo ello, retrasa la planificación deportiva.
Atenta a ella está el capitán del equipo, un Agustín Alejos que tiene claro que su futuro está en el Amfiv, siempre y cuando el equipo se mantenga. Y, además, tira de filosofía para explicar que “nosotros no aspiramos a ganar la liga ni nada parecido. Lo que queremos es poder competir ahí y que la gente con discapacidad de Vigo pueda hacer deporte. Es lo más importante y por lo que trabajamos”. Eso sí, desde su posición dentro de la pista, observa que “cada día la liga se hace más cara y se hace complicado porque los recursos son limitados”.
Es la realidad de un Iberconsa Amfiv que espera movimientos y concreciones para saber el escenario en el que moverse. No es nada sencillo en un mayo de incertidumbre. En días deben resolverse las cuestiones porque dirigentes, jugadores y hasta el entrenador, César Iglesias, deben resolver el futuro.
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