Rosa, la hermana de Déborah Fernández, la viguesa hallada muerta en 2002, difundió ayer una carta tras el cierre judicial del caso, que reproducimos íntegra a continuación:
"Millones de gracias a todos los que desde el primer día os habéis sumado a nuestra causa. Por desgracia hoy nos volvemos a sentir de luto. El sistema nos ha fallado, no solo a mi familia y amigos, sino a toda la sociedad. Han permitido que un asesino siga suelto. 23 años buscando respuestas que jamás llegarán, por culpa de un sistema que esperó más de 17 años en actuar, haciendo que estos últimos 5 años fuesen una farsa donde intentaron limpiar sus conciencias.
23 años de desaires y varapalos teniendo que escuchar cosas tan necias como que mi hermana se murió de forma natural o viendo cómo la fiscalía actúa como abogado defensor de un necio que jamás hizo nada en positivo porque se supiese qué pasó, ni colaboró... ¿Esa es tu forma de querer a quien te amó?
Aunque tristes y decepcionados por haber creído en un sistema que supuestamente nos defiende, nos vamos con la cabeza muy alta, muy orgullosos de todo el trabajo hecho y rodeados de un equipo maravilloso que se involucró desde el primer día como si Deboritah fuese un miembro de su familia.
Jamás tendré suficientes palabras de agradecimiento para ellos y para las miles de personas que cada día nos ayudaron a que Justicia Para Déborah fuese visible. Gracias.
Pero ya toca recuperar nuestra vida, a fin de cuentas es lo que Deboritah querría. Lo hemos intentado con todas nuestras fuerzas, con mucho empeño y con un peaje excesivamente caro que volveríamos a pagar si fuese necesario. Hoy toca despedirse y cerrar un episodio que para muchos dejará un vacío enorme en nuestros corazones. Deboritah no va a volver y en nuestra mano no está cambiar este sistema que protege más a los verdugos que a las víctimas.
Gracias de todo corazón a todos los que de un modo u otro estuvisteis ahí: amigos, prensa, medios, abogados, investigadores… Hoy la familia Cervera es mucho más grande y nos quedamos con lo único bueno que sacamos de todo este proceso, descubrir que todavía hay gente maravillosa que nos ha querido, mimado y cuidado en todo este proceso.
No obstante esto no es un adiós definitivo, el cierre de la causa nos permitirá hacerla pública y a partir de ahí que cada uno saque sus propias conclusiones, quizás la Justicia no está de nuestra mano, pero estamos convencidos de que la sociedad no mirará hacia otro lado.
En Vigo Deboritah siempre estará presente".
