El incremento de personas nacidas fuera de España, ya el 13 por ciento, hace que las cifras de población no acaben de coincidir
La brecha entre los cálculos que realiza el Concello y los números del INE (el Instituto Nacional de Estadística) no deja de crecer y el último recuento publicado esta semana por el organismo estatal mantiene las cosas como estaban: hay unos 6.000 vigueses “desaparecidos”, que para el Concello existen y residen en la ciudad, y, por tanto, cuentan como empadronados, mientras que según el INE su presencia no está confirmada en absoluto, por lo que se mantienen fuera del censo, en una especie de limbo. En 2023, para el Concello había 300.809 residentes, mientras que el instituto estadístico redujo el número total a 294.910.
Para 2024, el INE todavía no se ha pronunciado, pero sí el ayuntamiento, que elevó el total a 300.997, prácticamente la misma cifra que el año anterior, que está siendo revisada ahora por los técnicos estadísticos del Estado.
Todo indica que el desfase se mantendrá porque los nuevos vigueses son en su mayoría extranjeros, y una de sus características es su gran movilidad, trasladándose de un municipio a otro en función del empleo y otras cuestiones.
En Vigo hay ahora mismo algo más de 20.000 inmigrantes, aunque suman casi 40.000 las personas nacidas fuera de España (el 13% de la población total), muchas de ellas naturalizadas y otros hijos o nietos de españoles. Es el grupo que más crece y seguirá haciéndolo, mientras se reduce el de españoles, lo que garantiza que se mantendrán las tensiones en el censo. En 2021 eran 34.957; en 2022 llegaron a 35.960 y en 2023 subieron hasta 39.124. Con seguridad serán todavía más en este 2024.
Vigo, cada vez más vigués
Los datos más recientes del instituto gallego estadístico sobre el censo oficial de 2023 señalan que en Vigo sigue creciendo el número de vecinos nacidos en el propio municipio, rozando ya el 60 por ciento del total, una cifra descomunal. Entre las siete urbes gallegas solo Ferrol tiene un porcentaje superior de nativos, y por poco. Curiosamente, Ourense y A Coruña presentan una ratio muy inferior a la de los vigueses.
Hace más de 30 años que se vino abajo el mito de una ciudad sin apenas oriundos, más allá de las parroquias, o con mayoría de Ourense. A día de hoy, apenas un 10 por ciento habría nacido en la vecina provincia, que dio entre otros muchos notables incluso un alcalde, Manuel Soto, y una presidenta del Puerto, hoy teniente de alcalde, Elena Espinosa.
