Ya ha sido identificado el propietario de la media falange del pulgar de una mano que apareció en la cafetería La Junquera, en Redondela. Se trata de un vecino que vive a escasos metros del establecimiento y que, según informó Juan Figueirido, propietario del local, “lo perdió en el aserradero donde trabaja”.
El hallazgo se produjo el 29 de abril cuando “una camarera estaba limpiando y no sabía lo que era. Pensó que podía ser una uva y cuando lo vio bien se dio cuenta de que era un cacho de dedo”, declaró Figueirido quien puntualizó que ante el susto generalizado avisaron a los cuerpos de seguridad.
El propietario del establecimiento aseguró que fue días después cuando una mujer apareció para asegurar que el dedo era de su marido. “Al parecer no se podía coser al dedo y la mujer lo guardó para conservarlo. Más tarde vino aquí con el dedo con la chaqueta y se le cayó al suelo”.
Isolina Ramos, mujer del hombre que se amputó media falange, dijo para la TVG que tras el accidente fueron rápidamente al centro de salud y de ahí al Álvaro Cunqueiro, donde su marido fue operado de emergencia. “A la semana lo llamó la Policía preguntándole si había perdido un dedo y él dijo ‘non, eu téñoos todos’”. Isolina cuenta que al preguntarle por la amputación su marido confirmó lo sucedido.
Esta vecina aseguró que se encontraron el dedo al volver a la nave donde trabaja su marido. “Pensé ‘jo, que bonito el dedo’, porque mi marido tiene unas manos muy bonitas, y dije ‘lo vamos a llevar para enmarcar’, pero de cachondeo, traerlo a casa para hacer la broma. Lo metí en la chaqueta y me olvidé de él”. Isolina confirmó que la pérdida se produciría al día siguiente, cuando bajó a la cafetería. No sería hasta tres días después que no se daría cuenta de su pérdida.
