Profand Fishing Holding mantiene su posición como una de las compañías referentes dentro del sector pesquero español e internacional aunque 2023 fue un año complejo. La facturación de la viguesa fue de 930 millones de euros, en línea con el ejercicio anterior, que fue de 932 millones (la líder del sector es Nueva Pescanova con 1.074 millones en 2022) y una comercialización de 112.000 toneladas de pescado.
El grupo informó ayer de que realizó inversiones por valor de 63,3 millones en 2023, “completando un fuerte plan de inversiones en los últimos dos años, con el objetivo estratégico de ampliar y reforzar la capacidad industrial, así como fomentar la estrategia de integración vertical del grupo, acompañando a Mercadona en el desarrollo de su nuevo modelo de pescado”, explicó en una nota de prensa. En esa dirección, se enmarca la adquisición de una nueva planta de procesamiento en Boston y una granja de producción acuícola de langostino vannamei en Ecuador.
La compañía alcanzó en 2023 un Ebitda de 68 millones, un 14% más, pero el resultado del ejercicio atribuible se redujo por el incremento en los gastos financieros asociado a las subidas de los tipos de interés y fue de 12,3 millones, por debajo de los 15,6 millones de euros del ejercicio 2022.
El grupo comercializó en 2023 un total de 67 millones de bandejas, de las cuales 59 millones fueron producidas en España. Un incremento del 14% que viene de la mano de la apuesta de Mercadona por el nuevo modelo de venta de pescado.
Por otro lado, la empresa informó que alcanzó las 3.497 personas trabajadoras, de las cuales 1.884 son hombres y 1.613 mujeres. En 2023 incrementó su plantilla en 267 empleados en el mundo y, de estos, 219 corresponden a España, donde en los 2 últimos años se crearon un total de 504 nuevos puestos de trabajo. En Galicia, entre el 2021 y el 2023 se incrementó la plantilla en 367 personas trabajadoras.
En cuanto a su compromiso con la sostenibilidad, en el último año se redujo un 16% la energía consumida por tonelada de producto comercializado y el uso de plásticos reciclados aumentó hasta alcanzar un 41,6% del total. El uso de la tecnología HPP (High Pressure Processing), empleada por Profand en sus plantas de procesado, permite a la empresa aumentar la vida útil de sus productos sin aditivos y manteniendo las propiedades nutricionales de estos. Lo que se traduce en una considerable reducción del desperdicio alimentario y, en consecuencia, de las emisiones de CO2.
